sábado, 8 de diciembre de 2007

El Neoclásico

Como respuesta a los excesos del Barroco, el arte neoclásico llega motivado por la nueva atracción que despierta el mundo clásico, el interés surgido por la arqueología, las excavaciones de Herculano y Pompeya.
Esta corriente artística va desde el siglo XVIII hasta mediados del XIX instaurándose como el arte del racionalismo, ya que coloca la razón sobre la imaginación, el intelecto sobre la creación y la disciplina sobre la inspiración.
Como testimonio plástico del "Siglo de las luces", estéticamente aspiró a la luminosidad, la exactitud y el equilibrio.Recurrió a los modelos de la Antigüedad y se impuso un lenguaje frío, severo y solemne, donde lo helénico se convierte en norma académica.

Resaltan los temas mitológicos y de la historia contemporánea, representándose las figuras con vestimentas al estilo grecorromano, aunque sean personas del siglo XVIII las retratadas; las formas están en reposo o con poco movimiento.
A continuación, obras del pintor francés Jean Dominique Ingres, el cual hemos visto ya en clase



El mundo barroco

Se suele decir que el Arte Barroco es el arte de la Contrarreforma. Para reaccionar contra la severidad e iconoclastia del Protestantismo, la Iglesia Católica alentó la edificación de templos con profusión de escultura.Roma dirigió a los artistas a alejarse de los temas paganos que tanta aceptación tuvieron durante el Renacimiento, así como evitar los desnudos y las escenas escandalosas.
El siglo XVII fue una época de guerra y violencia como en pocas fases de la historia europea. La vida se veía frecuentemente atormentada en dolor y muerte. Por eso también era más necesaria que nunca la exaltación de la vida agitada e intensa para el hombre barroco. En ese contexto, se experimentaba el empuje de amar las pasiones de la vida así como el movimiento y el color, como si de una magna representación teatral se tratase. De hecho, se ha indicado con acierto que en las artes plásticas, el barroco intenta reproducir la agitación y vistosidad de la representación teatral. El barroco abandona la serenidad clásica para expresar un mundo en movimiento y agitación de los sentidos. Por tanto, la tendencia del barroco es a la exageración y la ostentación.
Cristóbal de Villalpando, Adoración de los Magos, 1683.
Universidad de Fordham, Nueva York.
Un hermoso ejemplo de ello es la Iglesia de San Francisco Xavier (hoy Museo Nacional del Virreinato) en Tepotzotlán, Estado de México.
En Europa, un notable ejemplo es Caravaggio, el Maestro del Claroscuro. He aquí una sucesión de imágenes y como fondo musical otro italiano: Ottorino Respighi.


miércoles, 7 de noviembre de 2007

Francesco Petrarca

Nacido en Arezzo, estudió primeramente Leyes en Montpellier y Bolonia para dedicarse en 1326 al estudio de la literatura y recibir Órdenes menores. Famoso ya en su tiempo por la calidad de su obra, fue coronado como poeta en 1341 en el Capitolio de Roma. Su vida cabe dividirla en dos etapas, una ligada al estamento burgués, en la que su obra está escrita en lengua vulgar, y otra cercana a la nobleza y el Papado, dominada por una escritura en prosa y verso latinos. En efecto, sus inicios estuvieron protegidos por la familia Colonna, a la que dejó más adelante para inscribirse en el movimiento unitario de Cola di Rienzi. Más adelante, pasó ocho años bajo la protección del arzobispo de Milán G. Visconti, falleciendo poco después en Arquá, Padua.
Su estilo literario recibe las influencias provenzales e italianas del "dolce stil nuovo", en especial en lo referente a la temática: la mujer, objeto de adoración por parte del poeta, quien alaba sus cualidades físicas y espirituales y se desespera en su visión o su recuerdo por su castidad angelical que la hace inalcanzable. Personificado en Laura el objeto de sus deseos -Laura de Noves, probablemente la esposa de Hugo de Sade, conocida por Petrarca en 1327-, el poeta escribe su célebre "Canzoniere". Es autor además de otras grandes obras como "Africa", de género épico; "De vita solitaria"; "Epistolae de rebus familiaribus"; etc.
SONETO A LAURA
No tengo paz ni puedo hacer la guerra;
temo y espero, y del ardor al hielo paso,
y vuelo para el cielo, bajo a la tierra,
nada aprieto, y a todo el mundo abrazo.

Prisión que no se cierra ni des-cierra,
No me detiene ni suelta el duro lazo;
entre libre y sumisa el alma errante,
no es vivo ni muerto el cuerpo lacio.

Veo sin ojos, grito en vano;
sueño morir y ayuda imploro;
a mí me odio y a otros después amo.

Me alimenta el dolor y llorando reí;
La muerte y la vida al fin deploro:
En este estado estoy, mujer, por tí.

BENDITO SEA EL AÑO

Bendito sea el año, el punto, el día,
la estación, el lugar, el mes, la hora
y el país, en el cual su encantadora
mirada encadenóse al alma mía.

Bendita la dulcísima porfía
de entregarme a ese amor que en mi alma mora,
y el arco y las saetas, de que ahora
las llagas siento abiertas todavía.

Benditas las palabras con que canto
el nombre de mi amada; y mi tormento,
mis ansias, mis suspiros y mi llanto.

Y benditos mis versos y mi arte
pues la ensalzan, y, en fin, mi pensamiento,
puesto que ella tan sólo lo comparte.

EN LA MUERTE DE LAURA

Sus ojos que canté amorosamente,
su cuerpo hermoso que adoré constante,
y que vivir me hiciera tan distante
de mí mismo, y huyendo de la gente,

Su cabellera de oro reluciente,
la risa de su angélico semblante
que hizo la tierra al cielo semejante,
¡poco polvo son ya que nada siente!

¡Y sin embargo vivo todavía!
A ciegas, sin la lumbre que amé tanto,
surca mi nave la extensión vacía...

Aquí termine mi amoroso canto:
seca la fuente está de mi alegría,
mi lira yace convertida en llanto.


martes, 30 de octubre de 2007

Giovanni Boccaccio

Escritor, poeta, hombre de vasta cultura, Giovanni Boccaccio es, con Dante y Petrarca, uno de los padres de la lengua italiana, el vulgar, como entonces se llamaba, en contraposición al latín.
Nacido en Florencia (o en Certaldo; las crónicas de entonces no son muy claras a este respecto) en 1313, Boccaccio tuvo una vida intensa, siempre difícil y turbulenta. el mismo, en obras autobiográficas, acentuó la incertidumbre sobre su lu­gar de nacimiento, diciendo que haba nacido en Paris y que era hijo natural de la hija de un rey. Esta versión, que se debe sin duda sólo a la fantasía de Boccaccio, ha sido descartada definitivamente, pero contribuye no poco a ilustrar el personaje, destacando su imaginación y su capacidad para transfigurar la realidad, velándola con la fantasía.
Boccaccio pasó su infancia en Florencia, donde estudió bajo la guía de Giovanni da Strada. A los quince años, en 1328, fue enviado por su padre a Nápoles para trabajar en el Banco de los Bardi, la compañía que dominaba el mundo financiero y controlaba la economía de la corte de los Anjou. Pero aquel mundo era poco apropiado para el soñador Boccaccio que, seis años después, comenzó los estudios de derecho canónico. Mientras tanto, completamente fascinado por la literatura, estudiaba los clásicos, los poetas y los cantos populares. Frecuentó la mejor y más culta sociedad napolitana y se enamoró de Fiammetta, a la que algunos han identificado con Maria d'Aquino, hija natural de Roberto de Anjou, que le inspiraria algunas de sus obras fundamentales. Está por demostrar si Fiammetta existió realmente o si fue más bien otra transfiguración poética de Boccaccio. Tampoco en este caso las crónicas proporcionan una información suficiente. Entre tanto, había empezado a escribir La caza de Diana (1334), las Rimas, el Filacoio (1336) y el Filostrato <1338>. En 1340, la quiebra de los Bardi le obligó a volver a Florencia, donde tuvo que enfrentarse a enormes dificultades económicas que, sin embargo, no le impidieron escribir. De los años 1340 a 1345 son sus obras Teseida, A meto, A morosa visión, Elegía de Madonna Fiammetta y Ninfal fiesolano.
La peste. En 1345, Giovanni Boccaccio comenzó a viajar. Hasta 1346 residió en Rávena, en la corte de Ostasio da Polenta y en 1347 se trasladó a Forli con Francesco degli Ordelaffi. Tras volver a Florencia en 1348, fue testigo de la epidemia de peste que, con todo su horror y su séquito de muerte y desesperación, le inspiró el Decameron. En esta obra, auténtica piedra de toque de la lengua italiana, Boccaccio imagina que, precisamente para escapar de la peste, algunos jóvenes y algunas muchachas se refugian en una finca fuera de Florencia. Aquí, a. lo largo de diez días (decamerón significa en griego (diez días), los jóvenes cuentan varias historias. Tres fuerzas protagonizan estos relatos. La primera es la inteligencia de los hombres, hacia la que Boccaccio siente una profunda admiración. La segunda es la fortuna, que favorece o dificulta los proyec­tos de los personajes, los enriquece y los arruina, los separa y los reúne. La tercera, en fin, es el amor. En el Decamerón tienen cabida todos los matices de la pasión, desde los más bajos a los más refinados.
Cuando Niccoló Acciaiuoli, buen amigo suyo, napolitano y alto funcionario de la corte de Anjou, le invitó a volver a Nápoles, Boccaccio aceptó. Pero pronto se retiró definitivamente a Certaldo, donde muere en 1375.
Este es el Decameron
Traer a clase la primera novela de la tercera jornada (
Masetto de Lamporecchio se hace el mudo y entra como hortelano en un monasterio de mujeres, que porfían en acostarse con él).

lunes, 22 de octubre de 2007

Los Goliardos

Goliardo, del francés antiguo gouliard, «clérigo que llevaba vida irregular», a su vez alteración del bajo latín gens Goliae, propiamente «gente del demonio», del latín Golias «el gigante Goliat», «el demonio». El término se utilizó durante la Edad Media para referirse a cierto tipo de clérigos vagabundos y a los estudiantes pobres pícaros que proliferaron en Europa con el auge de la vida urbana y el surgimiento de las universidadesen en el siglo XII . La mayor parte de ellos estudiaron en la universidades de Francia, Alemania, Italia e Inglaterra.
Parece que el nombre procede de gula («goloso»), por su insaciable apetito, y de la analogía fonética de Golias, que procede del gigante bíblico Goliat, al que se identificaba desde antiguo con el diablo. No es extraño, pues, que los concilios condenasen de forma recurrente a los goliardos y su vida disipada. Se cree incluso que en algún momento llegaron a crear alguna especie de secta o cofradía.

Pero, más allá de su forma de vida, lo que más interesa de los goliardos es su afición a la literatura. Muchos de ellos escribieron poesía satírica en latín, donde, expresando su descontento, criticaban a la Iglesia, a la sociedad y al poder, así como composiciones líricas donde elogiaban el vino, la taberna, el juego, las mujeres y el amor. La poesía goliardesca se cultivó por toda Europa durante la Edad Media. Las composiciones, casi siempre anónimas, son muy diversas: desde poemas sencillos hasta otros muy elaborados y retóricos.En España, los goliardos eran llamados sopistas y, de ellos, derivaría la actual tuna. Los primeros textos goliardos son del siglo XII-XIII y los más conocidos e importantes los " Carmina Buruana" ( la mayor parte del contenido es del Siglo XII), textos encontrados en la abadía benedictina de Beuren, Baviera, escritos la mayoría en latín, aunque algunos hay en alemán, especialmente versos y estribillos intercalados, unos pocos incluso con notaciones musicales que han permitido reconstruir la melodía de unos cuarenta. En total aproximadamente doscientos cincuenta. En ellos basó una Cantata de título homónimo el compositor alemán Carl Orff ( 1895-1982): Carmina Burana.

O Fortuna
(Carl Orff)

O Fortuna,
velut Luna
statu variabilis,
semper crescis
aut decrescis;
vita detestabilis
nunc obdurat
et tunc curat
ludo mentis aciem,
egestatem,
potestamem
dissolvit ut glaciem.

Sors immanis
et inanis,
rota tu volubilis,
status malus,
vana salus
semper dissolubilis,
obumbrata
et velata
michi quoque niteris;
nunc per ludum
dorsum nudum
fero tui sceleris.

Sors salutis
et virtutis
michi nunc contraria
est affectus
et defectus
semper in angaria.
Hac in hora
sine nora
cordum pulsum tangite;
quod per sortem
sternit fortem,mecum omnes plangite!

O Fortuna
(Carl Orff)
¡Oh Fortuna!,/como la luna/cambiante,/siempre creciendo/y decreciendo;/ detestable vida/ primero oprimes/ y luego alivias/ a tu antojo;/ pobreza/ y poder/ derrites como el hielo.// Destino monstruoso/ y vacío,/ tu rueda da vueltas,/ perverso,/ vano es el bienestar/ y siempre/ se disuelve en nada,/ sombrío/ y velado/ me mortificas a mí también;/ ahora por el juego/ traigo mi espalda desnuda/ para tu villanía.// El Destino está contra mi/en la salud/ y la virtud,/ empujado/ y lastrado,/ siempre esclavizado./A esta hora/ sin demora/ toca las cuerdas/ vibrantes;/ puesto que el Destino/ derrota al más fuerte, ¡llorad todos conmigo!
Ya que se trata de texto y música muy conocidos, prefiero dejar de lado para esta ocasión el original orquestal de Carl Orff, que todo el mundo conoce, y dejarles esta excelente versión de la banda sueca Therion. Lean la letra en latín y traten de seguirla, se pronuncia a la manera italiana (eclesiástica). Nota: no hagan caso de las ilustraciones del video que son bastante ordinarias.

jueves, 18 de octubre de 2007

Códice Gigas o la Biblia del diablo


Este es el manuscrito medieval más grande del mundo, el Codex Gigas o la "biblia del diablo", que tiene 624 páginas en pergamino y data de comienzos del siglo XIII.
El manuscrito es obra de un monje copista y miniaturista del monasterio de Podlazice, situado en el centro de la actual República Checa y que fue destruido en el siglo XV durante las guerras de religión. El libro toma uno de sus nombres (La biblia del diablo) de una estupenda estampa que representa al diablo. Cuenta la leyenda que el autor del Codex Gigas fue condenado a ser emparedado por un crimen grave, ante lo cual propuso hacer la obra en una sola noche, para expiar su pecado y para gloria de su monasterio. Para lograrlo debió pedir ayuda al diablo, por lo que, finalizado su trabajo, habría realizado el retrato de su "ayudante" en el manuscrito.
El libro incluye el Antiguo Testamento, así como otros textos de gran valor histórico, como la Chronica Boemorum (Crónica de los Checos) redactada en latin en el siglo XII o escritos del historiador Flavio Josefo.
Hace más de 358 años fue incautado a los checos como botín de guerra por las tropas suecas del general Konigsmark tras la Guerra de los Treinta Años (1618-1648). El ejemplar cuenta con 92 centímetros de alto, 50,5 centímetros de ancho, 22 de profundidad, y pesa 75 kilogramos. Se expone en un recinto de seguridad del Klementinum, el antiguo colegio jesuita situado en el corazón de la vieja Praga.

Se encuentra digitalizado en la Biblioteca Nacional de Suecia

martes, 16 de octubre de 2007

François Villon

(François de Montcorbier; París, 1431 o 1432-?, 1464) Poeta francés. De origen muy humilde, fue adoptado por Guillaume de Villon, capellán de Saint-Benoît-le-Bétourné, quien le dio su nombre y una educación religiosa. En 1443 se inscribió en la Facultad de Artes, donde obtuvo el título de bachiller (1449) y su licenciatura y maestría (1452).
De 1453 a 1455 fue un asiduo de las tabernas parisinas y participó en riñas callejeras. En una de ellas, el 5 de junio de 1455, hirió de muerte a un clérigo, Philippe Sermoise, y logró escapar bajo el nombre de Michel Mouton. Regresó en 1456 a París, donde tomó parte, en la noche de Navidad, en un robo de 500 escudos de oro perpetrado en el Colegio de Navarra; inmediatamente después huyó de nuevo, y durante cuatro años recorrió diversas partes de Francia.
Por motivos desconocidos, en 1461 fue arrestado en Meung-sur-Loire y torturado por orden de Thibaut d'Aussigny, obispo de Orleans. De regreso en París en 1462, fue encarcelado en el Châtelet y liberado después de prometer la devolución de 120 escudos de oro al Colegio de Navarra. Inmediatamente después se vio implicado en el asesinato del notario pontifical François Ferrebouc, siendo de nuevo arrestado y torturado. Su condena a muerte en la horca es conmutada, en 1463, por diez años de destierro. Desapareció entonces, sin que se sepa cuándo ni dónde murió.
En 1489 Pierre Levet publicó la primera edición en volumen de sus obras, que comprenden fundamentalmente dos poemas: El legado, de 320 versos, compuesto hacia la Navidad de 1456, también conocido como El pequeño testamento, y el Testamento, de extensión mucho mayor, compuesto entre 1461 y 1462.
La verdadera innovación de su obra reside en su realismo, sus contrastes de desenfadadas burlas y profunda emoción, y su desgarro expresivo, que la convierten en una de las obras medievales más cercanas a la sensibilidad moderna.

Balada de los ahorcados
Hermanos humanos
que viviréis después de nosotros,
No tengáis los corazones endurecidos,
Pues, si tenéis piedad de nosotros, pobres,
Dios tendrá de vosotros misericordia.
Aquí nos veis colgados a cinco o seis;
En cuanto a la carne,
que excesivamente hemos nutrido,
Hace tiempo que está devorada y podrida,
Y nosotros, los huesos,
nos tornamos ceniza y polvo.
De nuestro mal nadie se ría:
¡Pero rogad a Dios que a todos nos absuelva!

Si hermanos os llamamos, no debéis
tener desdén, aunque fuimos muertos
por Justicia. Pero sabed que todos los hombres
no tienen arraigada sensatez.
Perdonadnos, puesto que hemos partido
Hacia el hijo de la Virgen María,
Y que su gracia no esté para nosotros agotada,
Preservándonos del rayo infernal.
Estamos muertos, que nadie nos atormente;
¡Pero rogad a Dios que a todos nos absuelva!

La lluvia nos ha bañado y lavado,
Y el sol, desecado y oscurecido:
Urracas y cuervos nos han socavado los ojos
Y arrancado la barba y las cejas.
Jamás, en ningún instante, tenemos sosiego;
Hacia aquí, hacia allá, según sus variaciones,
El viento nos mueve sin cesar a su albedrío,
Más picoteados de pájaros que un dedal.
No seáis, entonces, de nuestra cofradía;
¡Pero rogad a Dios que a todos nos absuelva!

Príncipe Jesús, que sobre todos tienes dominio,
No dejes que el infierno tenga en nosotros señorío:
Que no tengamos con él, nada que saldar.
Hombres, aquí no hay razón para bromear;
¡Pero rogad a Dios que a todos nos absuelva!

P.D. Traer a la clase un resumen de la biografía de Villon.